Woody Allen es un tópico y yo
últimamente no encuentro nada de lo que busco o es tal vez que busco siempre
como inmóvil. Mejor dejar los párrafos aprendidos y dictados para otros y
decirles que me aburrí de lo lindo, a diferencia de los adolescentes a mi lado,
que reían exultantes mientras intercambiaban cotufas. Y escribirle a Woody,
claro, que el amor no es demagogia y por eso me abstengo de las fórmulas y le
ruego que si hay otra no desaparezca así en el metraje porque sus chistes son
un vestido que no encoge y siempre entalla; que si a usted le da por hacer con
tesón yo le celebro la belleza indiscutible de un hombre cantando bajo la
ducha, eso y poco más, pero lo celebro como quien agradece apenas un gesto en
la aridez del paisaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario